¿Cómo surge la idea?
Escribí Berrinche Garrapata hace un tiempo ya, inspirada en situaciones de la vida cotidiana particularmente con mi hijo pequeño ya que estaba transitando una etapa de muchos berrinches. Siempre me gustó escribir sobre las situaciones que voy viviendo en relación a la crianza, y dado que hace muchos años que acompaño familias que están criando niños pequeños, pensé podría ser una buena herramienta para ellos también.
¿Qué objetivos tiene el libro?
El cuento tiene como objetivo que podamos ponernos en el lugar de un niño pequeño que es “invadido” por una emoción, por un enojo o frustración de forma repentina. Es de esta forma que las emociones se presentan en los niños pequeños y esto es justamente lo que descoloca al adulto muchas veces. Entonces, el cuento, busca que podamos sentir lo que le pasa a este niño cuando el berrinche lo atrapa. Por otro lado, la historia también se propone mostrar que los niños no pueden identificar estas emociones como lo haría un adulto, por eso el pequeño se sorprende cuando se ve en el espejo, no se reconoce. Reconocer las emociones y regularlas requiere de un largo camino de maduración y aprendizaje para el niño. Por último- y creo yo lo más importante- el libro busca mostrar que un niño pequeño no puede calmarse solo, requiere de un adulto sensible que lo contenga. La mamá del cuento lo hace, y así el Berrinche Garrapata se aleja y se vuelve chiquito.
¿Quiénes participan?
El libro es parte de una colección llamada Desde Adentro que tiene otros dos títulos “Un día complicado” de Alejandro De Barbieri, y “Mis superpoderes ocultos” de Natalia Trenchi. Los tres libros fueron ilustrados por Sabrina Pérez y tratan sobre las emociones en los niños.
¿A quién está dirigido?
Berrinche Garrapata está dirigido a todos los niños y niñas que han sentido alguna vez que el berrinche los sorprendió, y a todos los adultos que acompañan a estos niños. Creo yo que los niños mas pequeños se identifican más con el personaje.
¿De qué trata tu historia?
La historia trata de un pequeño que se levanta como cualquier otro día dispuesto a jugar y de pronto el Berrinche Garrapata lo atrapa y se le sube a la cabeza ¡dejándole todos los pelos parados! Su mamá intenta peinarlo, vestirlo, pero al pequeño nada le viene bien ese día y se transforma en una garrapata berrinchuda. Al final, cuando el pequeño se asusta de su imagen en el espejo, su mamá logra que el Berrinche se aleje dándole un fuerte abrazo y haciéndole unas buenas cosquillas.
Yohana Sampietro
LIC. EN PSICOLOGÍA PERINATAL
cel. 099749329