Claudia, ¿cómo estás? Te cuento que tengo fecha de parto para finales de diciembre. Estoy muy entusiasmada con el hecho de poder amamantar a mi bebé y ya me quiero ir preparando. Justo me va a tocar el verano, época de más calor y quería saber si tengo que tener alguna consideración especial con la lactancia y también la conservación. Muchas gracias, soy Paula.
Hola Paula, muchas felicidades por tu bebé. Qué bueno que quieras informarte sobre la lactancia desde el embarazo, esto te puede ayudar a tener algunas herramientas e ideas más claras desde el principio.
Es cierto lo que piensas, los bebés de verano tienen algunas particularidades. El calor hará que sientan sed, esto puede llevar a que tomen pecho con más frecuencia. Generalmente, son bebés que tienen ritmos más irregulares, en algunos momentos toman pocos minutos (se entiende que es para saciar la sed) y en otros momentos realizan tomas más largas, quizás con un fin más nutritivo. A nivel general, la principal recomendación es ofrecer pecho a demanda y así te asegurarás que esté bien hidratado. Recuerda que no se ofrece agua a los bebés menores de 6 meses.
Sobre la conservación, es importante una buena higiene de manos y utensilios a la hora de la extracción, y refrigerar la leche extraída inmediatamente. Puedes colocarla directo en el freezer (donde se conservará de 3 a 6 meses) o mantenerla en el refrigerador por 48 horas.
Cualquier dificultad que tengas, no dudes en consultar con una asesora de lactancia que podrá ayudarte.
Claudia López (Psicóloga y especialista en lactancia)
Hola magdalena ¿cómo estás? Mi bebé de 7 meses va a transitar este año su primer verano y empezó a comer papillas hace unos meses. Quería consultarte si la alimentación en época de calor es diferente y además como cuidar la higiene de los alimentos que le doy. Gracias Lorena
Hola Lorena, con gusto te respondo. Durante los meses cálidos que se vienen es muy importante mantener una adecuada hidratación de tu bebé. Y con relación a tu pregunta, te recomiendo administrarle una alimentación equilibrada y saludable, basada principalmente en un alto consumo de frutas y verduras, y elegir alimentos ricos en agua para mantenerlo bien hidratado.
Recuerda que estamos en una excelente época del año en relación a la gran variedad de frutas y verduras riquísimas de estación. Las puedes introducir en forma variada: frutillas, ciruelas, peras, duraznos, etc. Puedes ofrecérselas en trozos pequeños, con yogur o zumos, etc. También es relevante que consuma otros alimentos como cereales, en forma de arroz o pasta; también aportar calcio (lácteos) a su dieta diaria.
El huevo es otro alimento importante, pero siempre dáselo bien cocido para prevenir intoxicaciones alimentarias como la salmonellosis, más frecuente en las épocas del año más calurosas. Recuerda que tu bebé ingiera más agua de la habitual durante estos meses de calor, a una temperatura ambiente y no colocarla en la heladera.
Te cuento además, que en verano se quema menos energía para mantener constante la temperatura corporal respecto a cuando hace frío, por lo tanto, el organismo necesita consumir menor cantidad de calorías a través de la alimentación. También en los niños el calor tiende a reducir la necesidad de calorías, y todo esto lleva a que muchas veces no quieran comer mucha cantidad y que lo hagan con menor entusiasmo. Así que si, durante estos meses de calor, tu bebé se alimenta menos de lo habitual, no te preocupes, es frecuente en ellos, siendo transitorio, y no debemos forzarlos a comer.
Respecto a la higiene de los alimentos, Lorena, es importante que siempre mantengas una adecuada manipulación y conservación, ya que durante los meses de verano, debido a sus altas temperaturas, existe un mayor riesgo de desarrollo de microorganismos. Es importante un correcto lavado de manos previo a la manipulación y una cocina siempre limpia y ordenada, puesto que allí es dónde se manipulan los alimentos. La falta de higiene puede crear focos de contaminación.
Recuerda siempre en estos meses intensos de calor salir con el biberón o vasito de agua de tu bebé, y con una “neverita” si es que trasladas alimentos que requieren refrigeración como por ejemplo alguna fruta. Espero haber respondido tu pregunta Lorena. ¡Mucha suerte y cualquier duda a las órdenes!
Dra. Magdalena Pardo (Pediatra)
Hola Marta, estoy embarazada de 30 semanas y ya esperando el nacimiento de mi bebé. Quería consultarte crees en el manejo activo de la primera etapa del parto. Por ejemplo, si mi dilatación progresa menos de un cm por hora, ¿recomendarías la ruptura artificial de las membranas o pitocín? Si el bebé y yo estamos bien, ¿voy a poder hacer trabajo de parto a mi propio ritmo y por el tiempo que sea necesario? Gracias Cata.
Qué tal Cata! Cada mujer embarazada y cada trabajo de parto son únicos. Por lo tanto lo ideal es respetar los tiempos de cada madre en este proceso y realizar la menor cantidad de intervenciones posibles. Lo importante es que los latidos fetales estén bien y que tú además de estar bien, te sientas contenida y segura. Para eso, el equipo que te atiende va a estar cuidando que todo esté bien y te va a ir explicando el desarrollo del proceso del trabajo de parto. Puedes ir buscando la posición que te resulte mejor y así vivirlo de la mejor manera posible. Es de gran ayuda darte un baño con agua tibia, pedir que la persona que te acompaña te realice masajes, escuchar música. Y siempre pensar en forma positiva, cada contracción te acerca al nacimiento de tú hijo.
De ser necesario realizar algún procedimiento o darte alguna medicación te lo van a explicar paso a paso. Confía en tu cuerpo y en el profesional que te atiende. Disfruta cada momento de esta etapa única en tu vida y que tengas un lindo parto.
Marta Arcieri (Obstetra partera)
Hola Nicolás, soy Esther y tengo problemas para dormir desde antes de estar embarazada. Ahora estoy transitando mi cuarto mes, la mayoría de las noches no duermo y eso me altera la calidad de vida y siento que también a mi bebé. Yo he tomado pastillas para dormir, pero ahora no quiero hacerlo. ¿Cuál es tu consejo frente a esto y los riesgos que corro tanto si tomo como si no descanso? Gracias.
El insomnio (dificultad para conciliar el sueño, presencia de despertares nocturnos o sueño poco reparador) es un síntoma muy frecuente durante el embarazo. Muchos de los cambios que se producen durante la gestación, como el aumento de la frecuencia de las micciones, náuseas y vómitos, acidez, dolores lumbares, calambres en las piernas o los propios movimientos del bebé, pueden desencadenar insomnio o agravar síntomas que se traían de antes, los cuales tienden a ser más importantes en el tercer trimestre.
Si bien la mayoría de las mujeres no lo identifica como un trastorno, cuando afecta la calidad de vida puede traer consecuencias negativas sobre ti o tu bebé.
Alguno de los siguientes consejos pueden serte útiles: cenar temprano y liviano, no consumir mate, café ni bebidas cola, beber poco líquido en la noche y orinar antes de acostarte; realizar ejercicio periódico como caminatas y musculación abdominal suave, preferentemente de mañana, usar calzado cómodo; reducir al mínimo posible la utilización de pantallas (TV, computadora, celular); ducha tibia, masajes o ejercicios de respiración antes de dormir; pausas durante tu trabajo de 5-10 minutos para descansar la mente.
En cuanto a la medicación, si bien en primera instancia intentamos evitarla, puede llegar a ser necesaria si no mejoran los síntomas con los cambios en el estilo de vida. Por lo tanto, no dudes en consultar a tu médico ya que muchas veces los riesgos de no descansar bien pueden superar a los potenciales riesgos de los fármacos utilizados.
Dr. Nicolás Martino (Ginecólogo)