Rondas de Crianza

Para entender un poco más de esta práctica, conversamos con Tatiana Ximénez, Doula, mamá de Benjamín de 8 años, y líder de un espacio donde se realizan estas rondas.

¿Qué son las Rondas de Crianza?
En las rondas de crianza se busca algo así como armar una "Tribu" de mujeres o familias que se puedan apoyar y contener desde el mismo lugar de la maternidad que están atravesando. El embarazo trae muchas cosas nuevas a las vidas de las mujeres y sus entornos: emociones, cambios físicos, hormonales, y es fundamental tener una red de apoyo en la que se puedan sentir contenidas desde una mirada amorosa, sin sentirse juzgadas ni juzgar, ni pretender cambiar, sólo escuchando y compartiendo experiencias, o dándole una mirada positiva y transmitiendo que estará bien, que algunas ya pasaron por eso y saben, las comprenden.
Hoy en los tiempos rápidos en los que vivimos se ha perdido un poco la costumbre de criar en conjunto, en tribu, con apoyo, nos hemos hecho seres mas individualistas no compartimos tanto, no hay tiempo. Pero si miramos hacia atrás, para nuestros abuelos, era normal compartir la crianza, juntarse con pares a hablar de los sentimientos o vivencias. Desde el comienzo de los tiempos las "Tribus" han existido, es una mirada natural de volver a conectarnos con lo que hemos olvidado, pero que tanto bien nos hacía.
Ser conscientes, que, ya desde el útero, empezamos a grabar nuestras memorias, hace que las madres tomen otra responsabilidad a la hora de la gestación y crianza sabiendo que todo lo que podamos trabajar y estimular desde la primera infancia será fundamental en la vida de nuestros hijos.
En las rondas compartimos sentimientos, emociones, lloramos, reímos, preguntamos, indagamos, aprendemos, escuchamos y sobre todo nos sostenemos y apoyamos, desde la mirada de mujer a mujer, desde el amor, sabiendo que hacemos lo que podemos y está a nuestro alcance, pero siempre dándolo todo por nuestros hijos y poniéndole amor a cada paso. Así se hace más fácil la maternidad, en grupo, en tribu, juntas.
Las mujeres pueden confiar en ellas, encontrando y conectándose con su poder de saber parir y criar sabiendo que si se conectan con ellas mismas, su intuición y su interior, aprendiendo a escucharse, podrán lograrlo.
Es importante que las mujeres conozcan sus derechos, como embarazadas, como madres. Que sean respetados sus deseos tanto en el embarazo, como en el parto y la crianza, que conozcan que hay leyes y derechos que son nuestros y que solo informándose podrán hacer uso de los mismos. Que puedan conocerse como mujeres y confiar en su cuerpo y en los tiempos que éste impone.
En las rondas, también se vuelca información sobre el proceso de crecimiento y desarrollo de los hijos. Se brinda información sobre los distintos tipos de crianzas y los beneficios que tienen para el bebé. El respeto del crecimiento fisiológico y natural, como por ejemplo la crianza libre que ha quedado olvidada por los mandatos sociales y los apuros por pretender que el niño logre las cosas antes del tiempo natural y propio de cada uno.

¿Quiénes pueden participar de estas rondas?
Hay distintas modalidades: pueden ser en familia, papá y bebé o mamá y bebé. La más usada o conocida es esta última, en las que participan mamás embarazadas o con bebés hasta 2 años. Es posible también que haya rondas con otras edades. Los niños van creciendo y los límites de edad cambiando, por eso se pueden formar grupos de 2 a 5 años y así ir variando. Es importante estar en grupos de edades parecidas para ir hablando de los desarrollos fisiológicos de esos niños y modos de crianza para cada etapa.

¿Qué tipos de vínculos se generan?
Estos encuentros y relaciones que se generan dentro, se trasladan fuera de las rondas. El vínculo que se forma es de extrema confianza, de empatía, de saber que contamos con alguien más que nos comprende y nos puede ayudar y escuchar si así lo necesitamos. Es un vínculo que comienza por la crianza de los hijos o por la gestación de ellos y que con el tiempo va creciendo y fortaleciéndose.

¿Con qué frecuencia se realizan?
Las rondas se hacen con la frecuencia que necesite el grupo, se adapta a las necesidades que manifiesten. Pueden realizarse rondas cada una semana, cada 15 días o cada un mes eso dependerá de la necesidad de esas mujeres en tener los encuentros.

¿Cómo surge la idea de tu espacio?
Mi idea de traer las rondas a Punta del Este o Maldonado surge a través de mi página de facebook en la que recibía a diario consultas sobre si facilitaba este tipo de espacios. Como yo pertenecía ya a una tribu de Doulas y me sentía tan apoyada, sostenida y aprendiendo tanto, me fui dando cuenta de lo mucho que esas mujeres gestantes o en puerperio necesitaban el espacio y lo bien que me hubiese hecho tenerlo en mi maternidad. Yo tengo mi "Tribu" en el grupo Anidándonos y Red Universal de Doulas, formado por doulas de todo el mundo donde compartimos experiencias, saberes, nos damos apoyo, contención y mucho amor, creando una red invisible y a distancia, pero que a la vez nos mantiene cerca, y que nos llena de confianza y linda energía.

“A veces el embarazo o el puerperio se transitan en total soledad y eso hace más difícil esta etapa de la vida para las mujeres y las familias en general. A veces sólo se necesita compartir con personas que están pasando por lo mismo para ser más comprendidas y escuchadas, desde otra mirada, de mamá a mamá”.

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