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Marzo/2019

La nueva maternidad

Desde hace décadas, el mundo y la sociedad vienen cambiando. En los países desarrollados e incluso en los que se encuentran aún en desarrollo, se habla de la “liberación” de la mujer, que busca consolidarse en lo profesional y lograr una estabilidad e independencia económica. Todo eso hace que la maternidad quede en un segundo plano y se postergue incluso más allá de los 35 años. Nuestro país no es la excepción. Aquí también muchas mujeres demoran la decisión de ser madres, lo que repercute directamente en la tasa de fecundidad.

¿Qué ocurre cuando se decide postergar la maternidad?
La realidad es que el reloj biológico pesa y la edad tiene impacto directo en la fertilidad, generando dificultades a la hora de concebir. Los óvulos, al igual que otras células, envejecen, disminuyen en cantidad y calidad lo que baja la probabilidad de quedar embarazada. Por otro lado, debe tenerse en cuenta los riesgos que pueden tener tanto para la madre como para el bebé en un embarazo tardío.
Lo que ocurre es que cuando por fin la pareja se decide, muchas veces luego de los 30 años, se encuentran con dificultades y el camino para poder traer un hijo al mundo puede hacerse cuesta arriba. Muchos ignoran que pueden ocurrir estos problemas y que el camino puede ser largo y difícil. Aunque no se encuentre en nuestros planes a corto plazo, podemos realizar estudios previos que ayuden a prevenir en el caso de ser necesario.
Por ello es importante acercar, tanto a mujeres como a hombres, información sobre la salud reproductiva y promover buenos hábitos y cuidados que ayuden a preservar su fertilidad.

¿Qué dicen los expertos?
Según la OMS (Organización Mundial de la Salud), la salud reproductiva es un estado de completo bienestar físico, mental y social. Supone que las mujeres y los hombres puedan elegir métodos de control de la fertilidad seguros, eficaces, accesibles y aceptables, que las parejas puedan tener acceso a servicios de salud apropiados que permitan a las mujeres tener un seguimiento durante su embarazo y que ofrezcan a las parejas la oportunidad de tener un hijo sano.

Estos datos nos alertan sobre el aumento de la infertilidad en los últimos años, la que se estima ha sido causada por múltiples agentes, como ya vimos la postergación de la maternidad es uno de ellos, así como los mayores índices de infertilidad masculina, y el aumento de las enfermedades de transmisión sexual que pueden ocasionar la esterilidad como secuela.

¿Existe alguna alternativa?
Como contraparte, la reproducción humana es una de las ramas de la medicina que más avanzó en los últimos 20 años. Esto ayuda a infinidad de parejas que se encuentran cursando dificultades con su fertilidad e incluso a parejas homosexuales que les permite poder procrear. La eficiencia de los procedimientos de reproducción asistida está dada por varios factores, alguno de ellos son:

*La calidad de los gametos
*La edad de la mujer
*El número y calidad de embriones transferidos al útero
*La calidad del endometrio
*Condiciones del laboratorio y capacidad de los profesionales a cargo
Estos avances otorgan una alternativa al deseo de postergar la maternidad que incluso puede llevar a la mujer a analizar su reserva ovárica e incluso poder extraer y conservar folículos para poder utilizarlos más adelante. Esta práctica, cada vez más frecuente, puede ser cuestionada.
Actualmente en nuestro país existe la Ley de Reproducción Humana Asistida (Ley 19167) que ayuda a regular los procesos y ha hecho que más parejas puedan acceder a ellos gracias a la ayuda económica.

¿Hay algo que podamos hacer previamente?
Es importante cuidar nuestra salud reproductiva y por ello aquí algunas recomendaciones de la Asociación Americana de Fertilidad:

* Realizar controles ginecológicos anuales desde el inicio de las relaciones sexuales
* Controlar el peso
* No fumar, consumir drogas o alcohol en exceso
* Conocer el período de fertilidad femenina
* Considerar el riesgo asociado a un embarazo tardío
* Realizar consultas médicas a tiempo frente a diversos signos de alerta
* Comer sano y realizar actividad física
* En el caso de pacientes oncológicos preservar tejido, (tanto óvulos como espermatozoides), antes de someterse a tratamientos de quimio o radio terapia
* Usar anticonceptivos de barrera como el preservativo para evitar enfermedades de transmisión sexual

Recuerda entonces que no tienes por qué esperar al momento de la concepción para comenzar con los cuidados de tu fertilidad. Puedes prepararte antes tomando las consideraciones necesarias. Y como vimos, estos cuidados son tanto para la mujer como para el hombre.


Ximena Querol / Asesora en lactancia materna / Doula


 

Fecha
02/03/2019
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